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Jéssica Retis
sociodemográfica de los diversos colectivos latinoamericanos y en contraparti
da analizar las principales basas ideológicas desde las que se piensa , concibe y
describen estos colectivos, propiciando así la construcción simbólica de una
realidad filtrada a través de los discursos masivos, en este caso concreto, de
la prensa española.
El fenómeno migratorio
Entrados en el 2003 es ya un lugar común afirmar que España ha pasado
de ser un país exportador de mano de obra a ser un país receptor de inmigra
ción. En los años recientes se han incrementado el número de investigaciones,
análisis y sondeos que intentan explicar un hecho que no por afincado deja de
ser reciente y poco conocido en su compleja magnitud [B). Lo repentino del
fenómeno, el vacío jurídico al que se enfrentó en sus inicios y la diversidad de
su naturaleza hizo difícil su medición y valoración tanto desde el terreno acadé
mico como el político. Después de la puesta en marcha del entramado legal [9)
y las consecuentes regularizaciones y contingentes, se pueden esbozar mejores
conclusiones acerca de sus dimensiones sociales [ 1 0). Sin embargo, y parafra
seando el último trabajo del Colectivo loé (2002), la naturaleza cambiante del
fenómeno migratorio en España relativiza la vigencia de los informes, de tal
manera que un análisis de la situación basado en datos de dos o tres años
atrás queda obsoleto y necesita ser actualizado.
Las fuentes más recurrentes a la hora de valorar cuantitativamente los flu
jos y stocks de inmigrantes en España son: a) Los censos anuales de población
B. El debate entre los expertos sobre migración rescata la falta de precisiones teóricas a la hora de abordar
un fenómeno tan cambiante y difícil de analizar. Joaquín Arango, especialista en la materia afirmaba recien
temente que ". . . la contribución del conjunto de las teorías a la comprensión de las migraciones, a mi juicio
sigue siendo bastante limitada. La razón fundamental es que las migraciones constituyen un fenómeno extre
madamente difícil de estudiar y de someter a marcos teóricos. Entre otras razones por su extrema divers�
dad. Lo que denominamos migraciones es un concepto multiforme, que abarca una enorme variedad de fenó
menos especificas, que, además se producen en sociedades distintas, e intentar simplificar y tratar a todas
las sociedades como si fueran iguales, empobrece la realidad. Yo creo que las teorías existentes dan menos
de lo que prometen; prometen explicar la causa de las migraciones, y por lo general lo que hacen es explicar
algo acerca de algunas migraciones, pero desde luego no de todas. . . Además, suelen dar las explicaciones a
posteriori, cuando ya se ha producido la migración. Pero no guían la investigación, no nos conducen a una
comprensión profunda del fenómeno, que nos permitiera entender por dónde van a evolucionar. Con las teo
rías de las migraciones ocurre un poco con los borrachos y las farolas: que sirven más para apoyarse en ellas
que para obtener luz e iluminación". La cita corresponde a la participación de Joaquín Arango en el debate
sobre los movimientos migratorios reproducido en el texto de: Alemany, Jesús Maria (2002]. La inmigración,
una realidad en España, Centro Pignatelli, Zaragoza, Gobierno de Aragón.
9. La importancia de los movimientos migratorios a nivel internacional supuso un apresurado cambio en las
políticas nacionales de los Estados. Mientras que en 1 976 sólo un 1 3% de loa países del mundo declararon
tener políticas migratorias, ya a mediados de los años noventa más del 40% de los Gobiernos declararon tener
políticas relativas a las migraciones internacionales. Los datos son de Diez y Ramirez (2001 J
1O. Recordemos que a principios de los noventa aún Izquierdo discrepaba de la estimación del Colectivo loé
sobre el volumen de extranjeros en situación legal. Estos lo calculaban en 534.000 y aquél lo estipulaba en
405.000. Izquierdo (1 992], pag. 1 26.